martes, 17 de abril de 2012
El IFE y la Libertad de Expresión
Desde el principio debo decirlo, en lo personal, estoy en contra de la reforma constitucional en material electoral que hoy hace de nuestro proceso electoral un juego cerrado entre partidos.
Hay tres puntos a los que me opongo:
1. La negación de la libertad de expresión.
2. El uso de nuestro dinero para financiar estos juegos electorales.
3.- El Club de Toby que se genera con el sistema electoral actual, en parte, como consecuencias de los dos puntos anteriores.
1. Libertad de Expresión. La Reforma constitucional, tuvo dos partes en este tema: en primer lugar, dió a los partidos (y al IFE) 48 minutos de publicidad gratuita en cada canal y estación de radio y televisión; en segundo lugar, prohibió a toda persona adquirir publicidad en medios, con fines electorales.
Suena genial que todos los partidos tengan un acceso equitativo a los medios electrónicos (aunque no es equitativo, sino proporcional, así que oímos más a los partidos con mas votos). Pero el resultado es que en estos días, recibimos una ola interminable de publicidad inocua, que nos llena de slogans, frases de campaña y no nos da información alguna. Por lo que respecta al IFE los partidos pueden decir cualquier tipo de mentiras o tonterías, y no hará nada.
Por otra parte, se prohibe a todo ciudadano o empresa, adquirir tiempos en radio y televisión para expresar idea alguna. Esta prohibición (constitucional) hace nugatoria la garantías de libertad de expresión, que básicamente quedo en la libertad de decir cualquier cosa, excepto opinar en materia política o de gobierno. Si no se puede hablar de política o gobierno (pues se puede considerar electoral), simplemente se niega la libertad por la que existe la libertad de expresión.
La libertad de expresión nace como un medio de permitir el debate abierto de idea políticas, de criticar al gobierno. En las sociedades actuales, sin medios electrónicos, es imposible que la ciudadanía participe de un debate sobre los temas importantes del estado. Y no olvido el problema que es que los medios estén controlados por empresas, que tienen una agenda propia, eso sucede siempre, y la forma de evitarlo es que haya diversas empresas, con intereses distintos jugando este juego (competencia); pero eliminar el control de particulares, para darlo a los partidos, es cambiar a un capitalista que busca ratings por un político que busca mantener a la población en la ignorancia, en su búsqueda de votos.
El ejemplo más reciente de esta situación es la agrupación México del Futuro, que fue duramente criticada, por tratar de poner temas relevantes en la agenda electoral, sin apoyar (al menos abiertamente) a ningún partido o candidato. Los partidos se indignaron, bajo los pretextos más absurdos que haya oído (y todos hemos oído muchos), para oponerse a que alguien diga algo fuera de su juego entre hermanitos.
En mi opinión, la libertad de expresión sin poder hablar de política, es como el derecho a votar por quien diga el gobierno. Es inútil.
2. Dinero a Partidos. México tiene muchas carencias, todos lo sabemos pero siento que tengo que decirlo de nuevo, pues vemos impávidos como los partidos, todos, gastan millones de nuestro dinero, que nos costo ganar a todos nosotros, en convencernos que lo gastaran mejor cuando los elijamos. En lo personal no apoyo un candidato, pero me niego que se use mi dinero (aunque lo haya pagado a hacienda, sigue siendo nuestro) para pagar carteles, periodicazos, mantas, pintas (de paredes, puertas, etc.) y estampas, botones y producción de comerciales que nos meten con embudo en cada canal y estación de radio y televisión, para convencernos de sus bondades.
Hay tantos usos decentes que podrían hacerse de ese dinero: desayunos escolares, camas de hospital (hasta vales de medicinas que promocionan algunos), protección del ambiente, carreteras, lo que sea, menos gastar un dineral en basura (eso será a partir del 2 de julio) que no ayuda a nadie, más que a los partidos políticos.
El origen del financiamiento público a los partidos es evitar que los "obscuros" intereses de empresas manchen a los partidos. De cualquier modo lo hacen, pero ahora además, tienen nuestro dinero. me opongo que mi dinero pague la campaña del PRI, PAN, PRD, Panal, Chiquillada y un largo etcétera, por la simple razón de que a mi me costo ganarlo y a ellos no. Porque podrían hacerse cosas mejores que dárselo a los partidos.
Cualquiera puede votar por un partido, eso no cuesta ningún trabajo; el verdadero apoyo a un partido o candidato se hace con la cartera. Decir que es un honor esta con algún candidato no cuesta nada. Darle dinero (el que sea) eso SI es un honor. Eso si demuestra el apoyo a un candidato. Parece que es mucho pedir a los partidos que convenzan a alguien de que los apoye con algo más que palabras.
Se que los partidos serían mucho mas receptivos a las demandas ciudadanas, si además de votos, les pidieran dinero. Puedo ver a todos los candidatos, yendo a ver a sus electores, si necesitaran mi dinero y de MI dependiera que lo obtengan. Pero como ya tienen mi dinero y mi opinión no cuenta al respecto, no los veo, ni nos oyen.
Si lo que nos preocupa que la mano que mece la cuna, creo que sería más útil obligar a los candidatos a revelar quien les da dinero, y pedir a Hacienda que verifique esto, a simplemente darles cubetadas de dinero y seguir sin saber quien más les esta dando dinero (la mano que mece la cuna, no tiene porque detenerse).
Los gringos (pragmáticos y capitalistas) dicen que el dinero es libertad de expresión. El derecho de apoyar una idea, con mis recursos es una forma de libertad de expresión. Tal vez no llegaría tan lejos, pero es lógico pensar que el derecho a opinar que ideas y candidatos se apoya con mi dinero, es racional y una expresión de mi propia libertad, de expresión de de dar el uso que YO prefiera a mi dinero.
Una elección, donde todos pagamos a los partidos, sin poder opinar al respecto, ya es un engaño. Es decir, lo honesto sería un candidato que diga: "Yo quiero tu voto, además del dinero que ya me diste".
3. Club de Toby. Imaginemos que el COFIPE no prohibiera las candidaturas independientes (que si lo hace), y que Maquío Jr., o Castañeda fueran candidatos. Salen a las calles, y van a competir sin dinero electoral (unos 100 millones de pesos al partido mas chico) y con la prohibición de pagar spots (por supuesto, el IFE tampoco les daría tiempo en radio y TV, eso es para los partidos).
Sobra decir que esa campaña esta muerta. Ahora podemos regresar a la prohibición de candidaturas ciudadanas. Claro, el COFIPE no dice eso, simplemente obliga a todo candidato a que lo postule un partido, que es lo mismo.
Si muchos opinan que las opciones que hay son todas malas, ya tenemos la razón para ello. Son las únicas que permite la ley. El sistema esta hecho para que nadie pueda entrar al club de los partidos. Crear un nuevo partido, sin comerciales de TV o Radio, y sin dinero público, es como remar en la arena, puedes avanzar, pero te cuesta un... chorro.
La reforma constitucional simplemente logró reducir la competencia política a los partidos actuales. Habría que preguntarse si alguno de los partidos políticos que tenemos podría obtener su registro hoy, con estas reglas; sobre decir que ninguno lo hizo, todos, incluido el Panal, obtuvieron registro bajo otras reglas, más sencillas.
El IFE debía ser una institución ciudadana, pero hoy no conozco a nadie que opine que hoy lo es. El COFIPE, fue aprobado, por el congreso, donde TODOS los diputados y senadores (y el Presidente) son militantes de uno de los partidos actuales. No hablo de conspiraciones, pero poner a los partidos en la posición que tienen para controlar este juego, y no sorprende que lo hayan convertido en un juego, donde sólo ellos juegan y de algún modo, tienen todas las fichas.
En fin, sólo quería ventilar mi opinión al respecto, no es que a nadie le importe, pero a mi sí. ¿Alguien quiere agregar al debate?
Un saludo.
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